Lucas 11:9 NBLA
"Así que Yo les digo: pidan, y se les dará; busquen, y hallarán; llamen, y se les abrirá."
................................................
Si oramos, esto es algo seguro: que si pedimos, recibiremos. El Señor lo ha dicho, es así y debe ser así.
¿Cómo podemos fortalecer nuestra fe para creer esto?
Pensemos en lo siguiente:
1) Por medio de la fe en Cristo somos hijos de Dios (Gal 4:6). ¡Qué posición más bendita!
2) Ya que Cristo es mayor que el cielo y la tierra, si se nos da a Cristo, Dios no nos negará nada (Ro 8:32).
3) Dios tiene gracia con todas sus criaturas y se deleita en misericordia.
4) Dios es suficiente para todo y omnipotente, gobierna sobre todas las cosas, es excelente en conocimiento, maravilloso en obras, y poderoso para salvar.
5) Pensemos en cómo Dios ha sido fiel en tiempos pasados. Si nos ha escuchado una vez en su misericordia, siempre nos escuchará.
6) Los Padres sobre la tierra cuidan de sus hijos; ¿Cuánta más piedad, amor y misericordia podemos esperar de nuestro Padre celestial?
Recordemos el gran amor de David por su hijo rebelde: «Absalom hijo mío!», o cómo la vida de Jacob estaba atada a la de su hijo.
Que esta verdad nos ayude a mantener las manos levantadas en oración.
Nuestro gran Dios ha plantado Su afecto en estos padres como una imagen de Su gran amor.
Tememos que nuestras imperfecciones, debilidades y que nuestras muchas faltas hagan que la mano de Dios no nos de cosas buenas.
Pensamos erradamente "¡mis oraciones son ignoradas y no sirven de nada!".
¡Hombre! Si un hijo ha pecado en gran manera y vuelve a casa sangrando, quebrantado, y libremente confiesa sus pecados, ¿no lo abrazaras y dirás fuertemente «hijo, hijo mío»?
¡Cuánto más nuestro Dios!
Cualquiera que sea tu caso, encontrarás que Dios es misericordioso al extremo.
Cuando éramos enemigos, Dios nos buscó y nos recibió.
¡Cuánto más ahora!
Que nuestra fe se tome fuerte de esto, para que aprendamos a estar con Dios y permanecer constantes en oración.
Algunas preguntas para pensar tranquilos:
- ¿Qué verdad aprendiste hoy?
- ¿Cómo vas a orar ahora?
- ¿Qué va a modificar en tu vida lo aprendido?
Comentarios
Publicar un comentario