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Devocional - Imitando a Jesús - Día 4


· Imitando a Jesús·

· El dolor ·

 
Isaías 53:3
Despreciado y desechado entre los hombres, varón de dolores, experimentado en quebranto; y como que
escondimos de él el rostro, fue menospreciado, y no lo estimamos.

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Antes de empezar el devocional, tomamos unos segundos para orar para que Dios nos guié, nos hable, nos muestre más de EL.

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Podes escuchar el devocional:

 

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¿Qué es el dolor? 


        Supongo que todos nosotros podemos dar nuestra propia definición, sobre todo porque nadie queda fuera de su experiencia; ya sea propio o como espectadores, todos hemos visto o sufrido dolor. 


        Algunos intentan definir las cosas comenzando por lo que no es; de esta forma, estaremos seguramente de acuerdo en que el dolor es algo que no es agradable, no es placentero, no es deseado, no es lindo y que no nos gusta vivir con él. 


        Sería un buen ejercicio con fines espirituales preguntar a personas de distintas edades y experiencias de vida qué es el dolor. 


        ¿Qué significado tiene el que Jesús sea “varón de dolores”? 


        Nuestro Señor sabe de dolor. Estoy seguro que la propia esencia del evangelio de Jesús es que Él vivió en sí mismo todos los dolores como una suma insoportable de lo que el diccionario de la Real Academia de Medicina define como “experiencia sensorial y emocional desagradable asociada a un daño tisular real a potencial”. 


        Es decir, dolor en su más intensa expresión. Lo sufrió aún mucho antes de la cruz, fue su plan.


        El dolor físico era el plan, el dolor emocional también era el plan; enseñarnos que la vida en Él estará cargada de aflicciones pero debemos confiar que Él ha vencido al mundo y tenemos la capacidad sobrenatural dada por el Maestro para experimentar triunfantes la experiencia inevitable del dolor. 


        Quizás en aquel punto donde el dolor y el amor se dan la mano poniéndose de acuerdo para llevar adelante la Gran Comisión. Aunque se haga presente el dolor, siempre será superado por el amor. 


        Porque ejemplo nos dio, para que como Él hizo, nosotros hagamos también. Él llevó nuestros dolores y cumplió la voluntad del Padre. 


        La experiencia de su vida nos enseña a ganar y a acompañar con amor a los que están en dolor. 


Escrito por: Adrián Villarroel


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Para compartir con los chicos:


        ¿Alguna vez te has lastimado y has sentido dolor? 

        Es una sensación fea, ¿verdad? 

        A veces, el dolor puede venir cuando nos tratan mal, nos ignoran o nos miran feo. 

        Pero sabes, hay alguien que ha pasado por todos los dolores, que los ha soportado todos y más que nadie. 

        Y Él puede ser tu amigo, Él sabe lo difícil y feo que es sentir dolor, pero también es quien mejor puede ayudarte cuando te suceden estas cosas. 

        Lo maravilloso es que después de que Él nos ayude con nuestro dolor, podremos ayudar a otros con lo feo que les esté pasando. 

        ¡Es increíble! Jesús nos ayuda a nosotros, y nosotros podemos ayudar a otros, y juntos superamos el dolor gracias al amor de Jesús.


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Para hacerle escuchar a los chicos :

 

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Nos preguntamos: 

▪️ Vamos a charlar y compartir: ¿Qué es lo que representa un gran dolor para cada uno de nosotros? 

▪️ ¿Por qué crees que sería un ejercicio espiritual preguntar a personas de diferentes edades y experiencias de vida acerca de su definición del dolor? 



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¡A poner en practica!

Vamos a conversar con diferentes personas acerca del significado del dolor y cómo Jesús los ayudó a enfrentarlo.

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Para terminar vamos a tomar un lápiz y un papel, y vamos a copiar en la hoja el siguiente versículo:

Isaías 53:3
Despreciado y desechado entre los hombres, varón de dolores, experimentado en quebranto; y como que
escondimos de él el rostro, fue menospreciado, y no lo estimamos.


 
















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