· Caminando con la familia de Abraham ·
· Encuentro con Dios ·
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La presencia de Dios está asegurando lo prometido: en el tiempo señalado, Isaac habría de nacer. Para Dios, nada, absolutamente nada, es difícil o imposible.
Abraham y Sara eran viejos, de edad avanzada; sin embargo, el Señor cumpliría su palabra.
Los tiempos de Dios son precisos, oportunos, justos.
Recorriendo los años y las cosas que fueron aconteciendo, es maravilloso ver cómo el Señor va desarrollando su plan con perfección y una profunda contención, que se demuestra en el amor, la misericordia y la fidelidad de su obrar para con Abraham y Sara. Qué reconfortante es pensar que aun en lo que nos parece distante, casi imposible, allí se manifiesta Dios.
“Decid a Dios: ¡Cuán asombrosas son tus obras! Venid y ved las obras de Dios, volvió el mar en seco; por el río pasaron a pie; allí en él nos alegramos. El señorea con su poder para siempre.” Salmos 66:3, 5, 6 y 7.
Dios cumple su palabra.
Escrito por: Jorge Ferrari
Para leer con los chicos:
Hoy Dios le confirma una vez más a Abraham que su hijito nacería, pero ya faltaba menos de un año!!! Qué emoción!
Para Abraham y Sara, esto podía ser dificil de entender; porque ellos ya eran viejitos, pero Dios les dice algo genial, el antídoto para la falta de fé…
¿Hay para Dios alguna cosa difícil ?
Y la verdad es que no, para Dios no hay nada difícil, nuestro Dios todo lo puede, y a Su tiempo Él cumple Sus promesas…
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Para los chicos y grandes:
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Para los chicos y grandes:
▪️ Digámosle a nuestros problemas: para mi Dios no hay nada imposible y Sus tiempos. Son perfectos.
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