...............................................
Los palos y las piedras pueden romper tus huesos…pero las palabras pueden romper tu corazón.
Los huesos rotos sanan. Solo toma un tiempo.
Cuando mi hijo tenía ocho años se rompió el brazo, tuvimos que ir al médico a Rayos X. A continuación, los huesos fueron acomodados y puestos en su lugar. Luego vino el yeso para sostener todo junto. Finalmente, fue hora de volver a casa. En los próximos días tuvo un poco de dolor; y eso requería que su madre y yo mostráramos compasión y cuidado mientras lo ayudábamos en todas sus necesidades. Perdió el pleno uso de su brazo durante un mes o algo así, pero después volvió a jugar, a lanzar una pelota de béisbol y a trepar los árboles.
El proceso de Dios para sanar un corazón roto es muy parecido al de sanar un hueso roto.
ORA. Ven a Dios y hazle saber que estás sufriendo. Él te escuchará atentamente. Sabrá exactamente qué hacer.
ESCUCHA. Dale a Dios la oportunidad de ver en tu corazón y tu vida, al igual que una radiografía y hacer su propia evaluación de lo que Él necesita hacer. Confía en Él. Él puede leer tus radiografías mucho mejor que tú.
DESCANSA. Dios pondrá sus brazos de amor alrededor tuyo y sostendrá todo lo que se ha roto con el yeso de su bondad y su gran compasión. Él te consuela con sus promesas y te rodea con su pueblo-la iglesia, que te sostendrá mientras sanas.
CONFÍA. Tal vez encuentres que no eres totalmente funcional durante un tiempo. Habrá algo de dolor. Comparte tu dolor con otros en los que puedes confiar –la gente en el Cuerpo de Cristo que te entiende y que te ayudarán a recuperar tu salud. Porque, así como para curar un hueso roto, tú no puedes hacerlo solo.
REGOCÍJATE. Un día cuando la santidad llegue, podrás reír de nuevo y enfrentar la vida con esperanza y alegría. Puedes contar con Dios. Tienes Su palabra. “Él sana a los de corazón quebrantado y les venda las heridas.
...............................................
▪️ Mientras leías, ¿qué llamó tu atención? ¿Qué vino a tu mente?
▪️ Si no sucedió así, te animo a orar y leer nuevamente el texto.
Y Ahora: 🤔
▪️ ¿Cómo lo aplicas a tu vida?
▪️ Toma nota de lo que aprendes, registra tus pensamientos y oraciones
▪️ Comienza y termina ORANDO, Dios afirmará su propósito en tu vida
▪️ NO TE DESANIMES! Aprender de Dios es un proceso que durará toda la vida, te animo a que seas constante!
................................................
También esta semana tenemos este pasaje para memorizar:
1 Pedro 4:8
Sobre todo, ámense los unos a los otros profundamente, porque el amor cubre multitud de pecados.
Comentarios
Publicar un comentario